Jade Ramírez / Perimetral
Para los pobladores de El Zapotillo, la ranchería de Cañadas de Obregón donde se construyó la cortina de la presa del mismo nombre sobre el río Verde, no es un secreto que los 274 millones de pesos que salieron del presupuesto 2020 para el megaproyecto, están sirviendo para enmendar y reparar daños estructurales en la construcción.
Ya en años anteriores se sabe de las reparaciones a la construcción, información confirmada a través de una solicitud de transparencia que respondió el Organismo de la cuenca Lerma-Santiago-Pacífico de la Comisión Nacional del Agua, donde especifica cuántos millones se han ido a reparaciones.
Por ejemplo, en 2019 se destinaron 257 millones de pesos en el presupuesto de egresos, de los cuáles 51.9 millones se fueron para pagar contratos por “diseño y construcción” según la respuesta que dio el organismo de la cuenca en el memorándum BOO81204-3187, pero desde 2014 por un fallo de inconstitucionalidad de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la obra está detenida y no puede incrementarse la altura de la cortina para el embalse artificial, la duda es ¿En qué se han gastado entonces esos millones?
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