Las células BOI enfrentaron en la cabecera municipal a hombres armados que disparaban en el pueblo, abatieron a dos y dos más fueron lesionados, los llevaron al hospital y se encuentran en calidad de detenidos.
Por Patricia Mayorga/Raíchali
A tres días de la reunión de la Mesa de construcción de paz o Mesa de seguridad en Guadalupe y Calvo, cuando los habitantes de la cabecera municipal revivieron los días de terror que han tenido durante este año y con mayor énfasis durante el mes de julio, hombres armados se enfrentaron en diversas partes del poblado e hirieron al velador del parque (de quien se omite el nombre por seguridad) que fue hospitalizado y se encuentra fuera de peligro, de acuerdo con habitantes del mismo lugar.
Foto: gobierno estatal
La versión extraoficial indica que hombres armados se enfrentaron en los barrios de la Periquera y Coronado, así como cerca del centro. La situación generó que más personas se preparen para dejar el pueblo de manera forzada.
La Fiscalía General del Estado informó la tarde de este sábado que fue durante un operativo implementado por las corporaciones que integran las células Bases de Operación Interinstitucional (BOI), enfrentaron a sujetos armados, en donde abatieron a dos agresores y detuvieron a otros dos que resultaron heridos.
“A eso de las 20:30 horas, cuando los efectivos de la Agencia Estatal de Investigación, Policía del Estado, Guardia Nacional y Ejército Mexicano, realizaban recorridos de seguridad, se atendió un reporte sobre detonaciones de arma de fuego en la cabecera municipal y en la avenida Zaragoza tuvieron a la vista a un vehículo con cuatro masculinos abordos, mismos que al ver la presencia de las unidades comenzaron a dispararles”, detalla el comunicado de la FGE.
Los elementos de seguridad repelieron la agresión, los hombres armados intentaron huir mientras disparaban, hasta que el vehículo en el que circulaban, marca Toyota línea Sequoia, color gris sin placas de circulación, cayó a un desnivel y quedó acampanado.
De la parte trasera del vehículo descendió uno de los agresores, quien disparó y cayó abatido de inmediato, agrega el comunicado.
En el lugar había además, dos personas lesionadas, por lo que las aseguraron y las trasladaron al hospital comunitario para su atención médica. Las personas fallecido no habían sido identificadas hasta ayer, mientras que los detenidos se negaron a proporcionar su identidad.
Según información del interior del hospital, uno de los hombres heridos está grave pero consideraban difícil trasladarlo a otra ciudad por la situación de violencia en el municipio, en donde un grupo delictivo tiene rodeado el poblado y sus alrededores.
Las dos personas fallecidas al igual que los detenidos dentro del término legal de la flagrancia por el delito de tentativa de homicidio y posesión de armas de fuego exclusivas del Ejército, portaban pecheras con cargadores para arma de fuego larga.
De acuerdo con testimonios de pobladores, privaron de la libertad a un hombre identificado como Édgar Martínez, hijo del exalcalde Rigoberto Martínez ya fallecido. Por la tarde de ayer trascendió que se encontraba ya en su casa, pero no se ha confirmado oficialmente esa versión.
Los pobladores indican que la vivienda y negocio de la víctima se encuentra cerca de una casa que los hombres armados han tomado para instalarse.
“Desde diciembre pasamos con miedo por el arco (de la entrada a Guadalupe y Calvo) y sabíamos que estaban los hombres armados ahí desde entonces porque por ahí hacían retenes y de reprente en la carretera. Todo se sabe, pero las autoridades no se dan a la tarea de actuar, sólo hasta que les llega la soga al cuello es cuando ya actúan, casi siempre por presión hacen su trabajo”, dice una de las habitantes, quien advierte que la gente está muy cansada de la situación.
Principalmente las personas rarámuri y ódami, quienes viven de la agricultura y actividades del campo, se han visto imposibilitadas para caminar y trabajar libremente. “Hay quienes trabajan sacando arena, otros del campo, en este tiempo muchos salen a juntar hongos y moras para vender, pero los hombres malos ya les prohibieron andar en el arroyo. Algunas personas corren riesgo”, indica uno de los testimonios recabados por Raíchali.
“Y pues yo le decía a la presidenta que una despensa no les basta hay familia grandes y sin trabajo necesitan más seguido el apoyo por lo menos hasta que se normalicen las cosas. En cuanto a los chavos que los recluten y las chicas que abusen de ellas, da mucho miedo que les pueda pasar algo”.
La FGE informó también los artículos decomisados, además del vehículo en el que se trasladaban los agresores: unn fusil Calibre .223/556 mm, modelo A15; un fusil marca norinco calibre 7.62×39 mm; un fusil marca uska calibre 7.62×39 mm; un fusil misrreseiver calibre 7.62×39 mm; tres pecheras porta cargadores color negro; 4 cargadores para calibre .223 mm. con capacidad de 30 tiros;14 cargadores para calibre 7.62x 39mm. Con capacidad de 30 tiros; dos cargadores para calibre 7.62x39mm. Con capacidad de 40 tiros; 124 cartuchos útiles calibre 7.62x39mm;118 cartuchos calibre .223mm; celular marca Samsung de color gris con la pantalla estrellada.
Localizaron además, un vehículo tipo vagoneta incinerada y en su interior una persona sin vida totalmente calcinada, quien tenía una herida por arma de fuego en extremidad cefálica.
