La llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia de México simboliza una oportunidad para el reconocimiento de la labor de las mujeres periodistas y defensoras de derechos humanos, así lo consideran diversas organizaciones para la defensa de los derechos de las mujeres y la libertad de expresión.
Por Karen García / @karen_gdlt / ZonaDocs
Hacer periodismo y defender derechos humanos en México es una resistencia diaria, ante las violencias y desafíos que diariamente enfrentan al ejercer su labor. Sin embargo, ser mujer y realizar estos trabajos conlleva un desafío mayor, en medio de un sistema patriarcal y machista que las violenta y denigra. No solo enfrentan agresiones, principalmente por funcionarios públicos, sino que son criminalizadas, desplazadas de sus hogares, desaparecidas y desprestigiadas.
Al tomar estas consideraciones y estar de acuerdo en esas premisas, es que periodistas, abogadas, defensoras de derechos humanos y organizaciones como el Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM), Comunicación e Información de la Mujer A.C. (CIMAC), Consorcio Oaxaca, Reporteros Sin Fronteras, la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México (RNDDHM), la Red Nacional de Periodistas, Artículo 19, Espacio de Organizaciones de la Sociedad Civil para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas (Espacio OSC), entre otras, redactaron una carta dirigida a la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, a la Secretaría de Gobernación Rosa Icela Rodríguez y a la Directora General del Mecanismo de Protección a Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, Tobyanne Ledesma.
En esta, las defensoras y periodistas solicitan una reunión para dialogar sobre los retos enfrentados y el reconocimiento de su condición de género en su labor como un agravante de los ataques y riesgos en este trabajo.
“Quienes suscribimos, mujeres, activistas, defensoras, periodistas, madres buscadoras, celebramos su llegada como primera mandataria y que el futuro de México esté en manos de una mujer, era una deuda histórica que urgía empezar a saldar.”, reconocen en la carta.
Además, distinguen que su trabajo ha contribuido a que el país tenga esperanza en un futuro más justo, con igualdad de género, libre de discriminación y violencia. Sin embargo, frente a esta misión se enfrentan también a problemas como el desplazamiento forzado interno, condiciones de riesgo, amenazas, intimidación, persecución, campañas de desprestigio, criminalización, etcétera.
Hasta el momento, las defensoras no han tenido respuesta alguna de estas autoridades.
Cirenia Celestino Ortega, coordinadora de estrategias de comunicación y el observatorio de medios de CIMAC, expresó en entrevista para Zona Docs, que el llamado va dirigido principalmente hacia la presidenta Claudia Sheinbaum y a la secretaria de gobernación, pues Tobyanne Ledesma del mecanismo de protección ya ha tenido acercamiento con las defensoras. Para ellas, es importante que autoridades como la presidenta se involucren en estos procesos para elevar la conversación y las acciones que deban llevarse a cabo.
“Se cometen más o menos 1 caso de violencia contra una mujer periodista cada cada tercer día, eso nos habla de la gravedad.”, comentó la coordinadora de CIMAC.
“Venimos de un sexenio que fue muy complejo, muy violento.”, insistió Cirenia puesto que, en el mandato del ex presidente Andrés Manuel López Obrador, cinco mujeres periodistas y 29 defensoras fueron asesinadas.
Además, señaló que fue durante este periodo y en las “mañaneras” donde el presidente criminalizó la labor periodística con distinciones como“prensa mala y buena”, dando lugar a agresiones hacia periodistas e incentivando de esta manera a que los principales agresores, los funcionarios públicos, no se detuvieran.
Por lo tanto, el logro de que una mujer ocupe la presidencia del país, abre la posibilidad de “tejer otra relación con la prensa”




¿Cómo puede hacerse posible?
Cirenia explicó que, de la misma manera en que López Obrador criminalizó a la prensa durante sus mañaneras, este puede ser un espacio en el que se reproduzca un mensaje distinto, de reconocimiento a la labor periodística como indispensable para la vida democrática de México. Para ello, es necesario que se declare cero tolerancia a la violencia contra la prensa y el respeto a la libertad de expresión. Lo que se esperaría es que esta nueva narrativa oficial alcance al funcionariado público y se abstengan de cometer actos violentos contra las y los periodistas.
No obstante, esto no es lo único que necesita una mejora, puesto que, el Mecanismo de Protección también tiene “sus falencias para incorporar la perspectiva de género”.
Este mecanismo urge fortalecerse con un análisis de riesgo, la emisión de medidas con perspectiva de género, la incorporación de medidas interculturales para la protección a mujeres indígenas y afrodescendientes. Así como la coordinación entre la federación y los mecanismos de protección de cada estado. Al respecto, Cirenia cuestionó que esta deficiente vinculación provoca más riesgos para las víctimas y sobrevivientes “de pronto te retiran las medidas de seguridad del estado, pero la federación tampoco se hace cargo porque era un caso de allá y queda desprotegida la mujer periodista o queda en medio de eso”.
Aunado a ello, recordó que desde CIMAC y las demás organizaciones solicitantes, han insistido en el reconocimiento de las familiares buscadoras como defensoras de derechos humanos, como vía para acceder a los mecanismos de protección y reparación como víctimas de violaciones a derechos humanos. Para Cirenia, esto sólo será posible si existe voluntad política de parte de las instituciones, entre las que destaca: un presupuesto asignado y transparente en la rendición de cuentas, además de una mejora en la capacitación y sensibilización del funcionariado público.
“La libertad de expresión no es un tema menor.”, declaró la coordinadora y afirmó que para que se ejerza, es vital que se garantice el derecho a una vida libre de violencia para las mujeres periodistas y defensoras.
Finalmente llamó a no olvidar y atender con urgencia los casos de las defensoras en situación de judicialización como Kenia Hernández, defensora de mujeres, pueblos indígenas y territorios, quien fue detenida en junio de 2020 mientras se manifestaba de forma pacífica y después fue acusada por el supuesto delito de robo con violencia. Además de Sandra Domínguez, abogada y defensora que denunció a un grupo de políticos oaxaqueños por compartir fotos íntimas y contenido sexual de mujeres indígenas y fue desaparecida en octubre de 2024.
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Este contenido fue originalmente publicado en ZonaDocs, integrante de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes ver su publicación.
