Chihuahua.- La intervención a los monumentos a la División del Norte y al Policía Caído, no provocó daños irreversibles, por lo que no hay elementos para agravar la protesta de grupos feministas en contra de la violencia que viven las mujeres en Chihuhaua, opinó el delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Jorge Carrera.
Además, explicó que las pintas no representaron un daño al patrimonio de Chihuahua ya que los monumentos que la ley considera históricos, se construyeron entre el Virreinato y el siglo XIX.

Foto: Federico Martínez

Foto: Federico Martínez
“Las valoraciones que hicimos en el centro INAH está en que no hay daños irreversibles, ya se les quitó la pintura, lo cual da elementos para no agravar más este hecho y no polarizar más las cosas”
En entrevista telefónica, el delegado comentó que internamente se hizo una valoración en donde concluyeron que, más allá de una afectación a los monumento, el trasfondo es un descontento social que, aunque se puede juzgar de muchas formas, no representó un daño irreversible.
“Nuestro punto de vista es que afortunadamente se pudo resarcir el daño, hacemos votos porque haya una mayor sensibilización en nuestra sociedad en lo que son los feminicidios y todos los elementos en contra de las mujeres”
Cuestionado sobre la postura de la alcaldesa María Eugenia Campos sobre castigar a quienes intervinieron ambos monumentos, Carrera Robles consideró que este tipo de movimientos sociales deben servir para abrir el diálogo entre las autoridades y la ciudadanía, no para sancionar.
“La actitud del INAH es en el sentido de que el patrimonio no es algo muerto, sino vivo y nos debe servir para explicar el presente. El patrimonio nos ayude a dialogar, entiendo que para algunos no es la manera correcta de manifestarse y que para algunos implica una falta de respeto a la normatividad existente, pero más allá de todo eso debe imperar el diálogo, ojalá encontremos el cauce para que estas circunstancias se atienda en la medida de lo que somos que es una sociedad madura y abierta al diálogo”
Ambos monumentos fueron intervenidos la madrugada del viernes en apoyo al movimiento nacional que exige justicia para la joven de 17 años que denunció a cuatro policías por violación en la Ciudad de México.